El 2020 fue un año de explosión para el e-commerce. Según la consultora Euromonitor, las ventas de los retailers en el canal digital, que incluye retailers físicos con presencia digital, crecieron 91% en el 2020, y se proyecta que este año 2021 crezcan 25%. En ese contexto, es fundamental que las empresas sigan realizando acciones para mantenerse competitivas.
Otro de los cambios dados por el COVID-19 fue en los patrones de consumo de los clientes. La aceleración de la vida digital produjo un consumidor mucho más exigente: que busca y quiere los productos y servicios disponibles de inmediato, demanda una respuesta en tiempo real por parte de sus proveedores ante un problema o una inquietud, necesita experiencias únicas para seguir comprándole a una marca y busca la mayor personalización posible.
En ese contexto, uno de los principales problemas con los que se enfrentaron las empresas peruanas fue el tema de la logística. En su mayoría se enfocaron en la venta, pero faltó planificación de la logística, desde el canal de distribución, el manejo eficiente del stock y todos los procesos de pedido que se deben gestionar con las empresas mayoristas y minoristas para lograr que la experiencia del cliente sea exitosa.
Es importante tener todos los canales online y offline disponibles. Las empresas se dieron cuenta que debían lograr una logística más eficiente y aplicar una estrategia omnicanal. El tema de omnicanalidad es bastante importante porque logras ser más atractivo ante el consumidor por varias razones. Una de las principales es porque puedes acelerar los procesos de envío, enviar productos chicos directamente desde la tienda o utilizar tu distribución de tiendas para hacer más eficientes los envíos.
Para lograr optimizar las áreas claves del sector de distribución es necesario contar con datos. Estos son uno de los recursos más valiosos que tiene una organización, y es por ello que los datos deben ser aprovechados por todos los usuarios, tanto de negocio como de TI en todos los niveles de la organización.
La forma de poder recolectar y aprovechar al máximo los datos es a través del uso de las soluciones tecnológicas. La digitalización es el camino para que todo el proceso productivo funcione eficaz y eficientemente.
El mercado de hoy demanda una velocidad de respuesta distinta y para lograrlo la innovación es necesaria. El mercado digital seguirá creciendo en el mediano plazo. Muchas personas especulaban que al reabrir los mercados, se iba a dejar de comprar online. Sin embargo, los cambios en los hábitos y formas de consumo del consumidor son patrones ya establecidos. La gente sigue comprando por internet, pero prefiere más las opciones de omnicanalidad. Al final todo depende de la experiencia integral que las empresas puedan ofrecer, siendo la cadena de suministro una parte indispensable.
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