El sector agroindustrial se encuentra ante el gran desafío de afrontar el aumento de los costos de la cadena de suministro; proceso fundamental para garantizar el éxito de una industria que comercializa diariamente millones de productos en todo el mundo.
El comercio mundial de frutas y verduras ascendió a un valor de US$ 220 mil millones en 2020. Con más de 200 orígenes y 200 destinos, la industria mundial de productos la conforman productores de pequeña, mediana y gran escala y una compleja cadena de suministro nacional y mundial, para mantener la seguridad alimentaria y la calidad de sus productos.
Uno de los valores más importantes para asegurar la calidad de la producción agrícola es la capacidad de lograr la trazabilidad de los productos a lo largo de toda la cadena de valor; de la misma forma, asegurar la calidad y eficiencia de toda la cadena de suministro, resulta hoy en día una de las principales ventajas competitivas de una empresa agroindustrial.
Las industrias mundiales de productos frescos asumieron los incrementos de los costos logísticos que impactaron sus negocios durante la pandemia, costos que hoy se siguen generando por lo que diversas organizaciones de productores de frutas y hortalizas de todo el mundo, han hecho un llamado a las autoridades públicas nacionales y regionales, así como a los organismos multilaterales, como la Organización Mundial del Comercio (OMC), la FAO, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y otros, para que respondan con urgencia ante las actuales y significativas alzas de los costos logísticos, de los insumos como fertilizantes y materiales para embalaje y energía.
El sector ha experimentado un aumento entre 150%-400% en los precios de los contenedores, un 20% en el transporte por camiones, y hasta un 80% en el transporte aéreo. Asimismo, están enfrentando incrementos de hasta un 100% en los costos de los fertilizantes y en los precios de los palets de madera.
Al respecto, la coalición de industrias de productos frescos ha solicitado aumentar la atención y el reconocimiento de las frutas y hortalizas como un “bien estratégico” que tiene una importante contribución a la sustentabilidad del planeta a largo plazo y a las políticas de salud pública; así como crear mecanismos de estabilización para mejorar la accesibilidad de los productos frescos, para garantizar que las frutas y verduras puedan seguir estando al alcance de todos.
La digitalización de la cadena de suministro a través de un sistema de Supply Chain Management, permite a la agroindustria gestionar con eficiencia cada eslabón, optimizando costos al acortar tiempos y eliminando errores, reduciendo significativamente y/o eliminando gastos innecesarios.
Las soluciones de SCHM se integran a una plataforma inteligente de gestión que interactúa con todas las áreas de la empresa agrícola, permitiendo gestionar datos en tiempo real para tomar decisiones que impactarán positivamente en toda la cadena de suministro.
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